¿QUÉ ES UN MUN?

MUN son las siglas por las que se conoce de forma abreviada el Modelo de Naciones Unidas. Se trata de una actividad educativo-cultural que consiste en representar el protocolo de las Naciones Unidas, un simulacro que reproduce el modo en que se reúnen y negocian los distintos países del mundo sobre temas de interés para la humanidad. En el Modelo de Naciones Unidas cada Escuela que participa representa una delegación diplomática y toma posición en los debates y negociaciones como si fuera el país que le ha sido asignado por los organizadores. Para el éxito de la actividad es fundamental el entrenamiento previo de la delegación, que los meses anteriores debe profundizar en el conocimiento exhaustivo del país asignado que representa y también en los protocolos de debate de Naciones Unidas.

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El MUN aplicado a la enseñanza persigue varios objetivos. Por un lado, es una actividad educativa y, como tal, pretende que los estudiantes conozcan de primera mano cómo funcionan las relaciones internacionales y cómo trabajan instituciones como la ONU. Asimismo, persigue la formación de los jóvenes en técnicas de debate, oratoria y negociación. Por otro lado, se trata de una actividad cultural que favorece la creación de lazos entre alumnos de distintos lugares y que sienta las bases para posibles relaciones –amistosas y profesionales– en el futuro. El MUN parte de la idea de que los jóvenes de hoy serán los líderes del mañana. Y, hoy más que nunca, necesitamos líderes empáticos y tolerantes que sean capaces de ver la realidad desde distintos puntos de vista
La estructura del MUN es similar en todos los países y encuentro:

  • Primero, la delegación organizadora abre una fase de inscripción. Las distintas delegaciones que quieren participar deben enviar un formulario en los plazos establecidos.
  • Después, la delegación organizadora realiza un sorteo y asigna a cada delegación el país que representará en el MUN. Asimismo, facilita la agenda con los temas y comisiones en los que participará cada delegación.
  • Desde el momento en que se asigna un país y hasta el encuentro, comienza la fase de capacitación. Con apoyo de la delegación organizadora (que facilita materiales, un manual y el reglamento), cada delegación prepara su posición en los debates y se entrena a conciencia para el MUN.
  • Por último, las delegaciones se desplazan al lugar del encuentro y durante tres días participan en el desarrollo del Modelo. El objetivo final del MUN es que las delegaciones lleguen a redactar resoluciones (que se elaboran según el modelo protocolario de la ONU y se leen el último día). La resoluciones pueden enviarse a la “ONU real” para que tenga conocimiento de los puntos de vista expresados por los jóvenes de todo el mundo.

Para que el MUN sea un éxito, debe ajustarse lo más posible a la forma real en la que funciona la ONU. Es necesario que se respeten los códigos formales de vestir y las formas protocolarias de relacionarse. Asimismo, es esencial que los temas que se debatan estén de actualidad y formen parte de la agenda de la ONU.

El primer Modelo de Naciones Unidas se celebró en la facultad de políticas de la Universidad de Harvard en los años cincuenta del siglo pasado. Hoy en día se trata de una actividad muy extendida y consolidada no sólo en Estados Unidos sino en todo el mundo: 40 países celebran Modelos, en los que participan más de 200.000 estudiantes de secundaria y universitarios cada año. El TECMUN en México, el YMUN en China o el SEKMUN en España serían solo algunos destacados ejemplos. En todo caso, la escala y ambición de la actividad es flexible y adaptable: se puede organizar un Modelo para una clase, un curso, una escuela, una red nacional o internacional.